EVOLUCIÓN DE LA PIGMENTACIÓN ALAR EN HEMBRAS ADULTAS DE INSECTOS DEL ORDEN ODONATA

Abstract

La teoría de la selección sexual explica la presencia de caracteres extravagantes llamados caracteres sexuales secundarios (CSS). Los machos de numerosas especies animales presentan uno o varios CSS. Si bien su función sexual está bien documentada, indicando que están ligados al éxito reproductivo de los machos, poco se sabe sobre su origen evolutivo. Un CSS notable en machos adultos de algunas especies de Odonatos es la presencia de pigmentación alar. Usando a las libélulas como grupo central, un estudio filogenético comparativo reciente, demostró que la pigmentación alar evoluciona únicamente si niveles altos de selección sexual evolucionan primero. La pigmentación alar en Odonata no es exclusiva de los machos, pues existen especies donde las hembras la presentan. Aunque se sabe que este carácter advierte su potencial reproductivo, mostrando una correlación negativa entre la cantidad de pigmentación alar y el número de parásitos presentes, se desconoce completamente su origen evolutivo. Se ha observado además, en especies territoriales, una tendencia en las hembras a presentar patrones pigmentados en sus alas, lo cual sugiere que la evolución de la pigmentación alar femenina ha ido a la par de la pigmentación alar en machos. A partir de un acervo fotográfico de 146 especies de Odonata, se realizó una reconstrucción filogenética a partir de datos de presencia- ausencia mediante el método de máxima verosimilitud. Mediante métodos filogenéticos comparativos direccionales (Bayes Traits-DISCRETE) usando 1) la pigmentación alar masculina y 2) la territorialidad en machos como variables predictivas de la pigmentación alar femenina, se puso a prueba si esta característica evoluciona en las hembras de forma correlacionado con los cambios en la presencia de pigmento en machos. Los resultados sugieren que la pigmentación alar de machos y hembras han coevolucionado, y que las hembras adquirieron la pigmentación poco después de que los machos lo hicieron. Probablemente la pigmentación en las hembras pudo haber evolucionado tras la aparición de niveles cada vez más intensos de selección sexual actuando en machos. Sin embargo, la pigmentación en hembras no permanece constante, existen regresiones al estado ancestral, seguidas por transiciones en las que se adquiere nuevamente el carácter. Si bien la evolución de la pigmentación alar en machos va de la mano con intensidades diferentes de selección sexual, no es el caso para las hembras.