Efecto de la gestación y la primiparidad sobre la organización histológica de la vagina pélvica de la coneja

Abstract

En mamíferos, la vagina es controlada por las fibras nerviosas autonómicas y somáticas. Esta inervación coordina la fisiología vaginal durante la respuesta sexual mediante los componentes tisulares en el tracto urogenital. Tanto la inervación como los componentes del tracto urogenital son afectados por la gestación, el parto y la multiparidad. En rata, la gestación y el parto promueven la disminución de fascículos nerviosos intramurales en la vagina y uretra, respectivamente. Por otra parte, se han reportado modificaciones histológicas y funcionales en la vagina, por efecto hormonal (ovariectomía) y mecánico (distensión vaginal). En el modelo de multiparidad en coneja, se ha descrito cambios en la morfología de la pared vaginal y en los ganglios paravaginales. Desafortunadamente, la complejidad que engloba la multiparidad dificulta evidenciar el efecto de los cambios hormonales durante las gestaciones y el efecto de la distensión vaginal debida al parto. Por lo que, el objetivo de este trabajo es analizar el efecto del historial reproductivo de la coneja, desde el final de la gestación y hasta el día 20 posparto, sobre la organización neural e histológica de la pared vaginal pélvica. Los resultados indican que la gestación y el parto no afectan el espesor de las capas de la pared vaginal, ni la proporción de músculo liso y estriado con respecto al colágeno en la capa interna y externa de la pared vaginal. Sin embargo, se observan modificaciones en la distribución de la musculatura lisa y de colágeno. Por otra parte, la cuantificación de estructuras de tipo neuronal, haces nerviosos y ganglionares por campo, son similares en cada grupo con respecto al grupo virgen. La gestación y el parto disminuyen el área transversal de los ganglios paravaginales y el área del soma de las neuronas, sin embargo, 20 días después del parto se recupera ambos parámetros. De manera cualitativa se observa que la gestación disminuye la inmunorreactividad de receptores de estrógenos (α y β) y tirosina hidroxilasa en las neuronas de los ganglios paravaginales, este efecto se restablece después del parto. Estos resultados sugieren la coordinación neuro- hormonal para controlar la fisiología vaginal que antecede al parto. Además, las modificaciones en la inervación paravaginal en la región pélvica observadas en la gestación y el parto se restablecen en un periodo posparto tardío. Se sugiere que las modificaciones observadas en el modelo de multiparidad se deben al número consecutivo de eventos reproductivos.