Efecto de lesionar químicamente el núcleo paraventricular (NPV) de conejas lactantes sobre la periodicidad circadiana del amamantamiento y la duración del tiempo en el nido

Abstract

En la coneja, la conducta maternal (CM) inicia antes del parto con la construcción del nido maternal. Este proceso consta de tres actividades: la excavación de una madriguera, el acarreo de paja y el arrancado de su propio pelo incorporados al nido. El inicio y declinación de estas etapas están regidos por cambios en la concentración de hormonas de la gestación. La CM post-parto parto se centra en la lactancia que dura cerca de 30 días, durante los cuales, la frecuencia con la que la madre entra al nido, se mantiene constante y cada episodio de amamantamiento dura aproximadamente tres minutos y ocurre con periodicidad circadiana. El estímulo mecánico de la succión es indispensable para la regulación de la CM post-parto, pues al reducir la camada a uno ó dos críos, se incrementa: el número de entradas de la madre al nido en un día y el tiempo que pasa la madre con los críos dentro del nido. Las consecuencias neuroendócrinas de la succión en la coneja incluyen, principalmente, la secreción de la prolactina y la oxitocina (OT), para la producción y la evacuación de la leche, respectivamente. Por otra parte, durante la lactancia, se incrementa el número y el tamaño de las neuronas que sintetizan OT, en el núcleo supraóptico (NSO) y el núcleo paraventricular (NPV), en comparación con el estro y la gestación. Asimismo, el estímulo es suficiente para sincronizar la actividad locomotora y la expresión de PER1 en las neuronas oxitocinérgicas del NPV y el NSO pero no en el núcleo supraquismático (NSQ). Por otro lado, en la rata, la lesión del NPV en el embarazo tardío previene el inicio del comportamiento maternal mientras que las lesiones hechas durante la lactancia temprana provocan solamente efectos selectivos sobre algunos aspectos de la conducta maternal. La evidencia sugiere que, las señales provenientes de la succión impactan sobre regiones específicas del cerebro, que regulan la motivación de la madre para entrar al nido y amamantar a su camada. Sin embargo, se desconoce la participación del NPV en la regulación de la periodicidad y la duración de cada episodio de amamantamiento. Por lo tanto, el objetivo de este trabajo fue determinar los efectos de la lesión química del NPV durante la lactancia temprana, sobre la conducta de amamantamiento (i.e. la periodicidad y la duración de cada episodio de succión), en conejas que amamantan a una camada de 6 a 7 críos durante la lactancia temprana. Se utilizaron 21 conejas adultas primíparas (Oryctolagus cuniculus), que amamantaban una camada de 6 a 8 críos y mostraron un comportamiento materna normal a lo largo de siete días consecutivos. Se mantuvieron en un bioterio [fotoperiodo Luz/ Oscuridad (14h:10) a temperatura natural] , dentro del cual se instaló un sistema de circuito cerrado de video para monitorear ininterrumpidamente su comportamiento. Las hembras dispusieron de agua y alimento ad libitum, que se cuantificaron diariamente como indicadores de bienestar. Luego de siete días de registro conductual (post-parto), las hembras fueron sometidas a la microinyección bilateral del NPV (coordenadas: A = 1.5, L = ±1, DV = 15) con AK (0.5µg/µl). Las hembras se sacrificaron 15 días después de la cirugía, sus cerebros fueron removidos, crioprotegidos y seccionados coronalmente a 40µm. El tejido fue montado en portaobjetos y teñidos con violeta de cresilo para apreciar las estructuras neuroanatómicas y determinar el volumen del área lesionada por medio del método de Cavalieri. Mientras que para calcular la hora del amamantamiento en cada hembra, y si los eventos ocurrían con periodicidad circadiana, se utilizó el análisis de Rayleigh. En cuanto a los indicadores de bienestar, se encontró que el consumo promedio de agua y alimento durante la gestación fue de 407 ± 157.7 ml. y 154 ± 59.7gr respectivamente, mientras durante los primeros días de lactancia, las hembras registraron un incremento significativo (P<0.001) en ambos indicadores (agua: 551.6 ± 157.6 ml; alimento: 237.3 ± 91.8gr Media±DE). Luego de la cirugía, no se encontraron diferencias significativas en el consumo de agua y alimento entre los tres grupos de hembras lesionadas. Sin embargo, cuatro hembras dejaron de comer y/o beber por un día luego de la lesión, tres de ellas pertenecientes al grupo de lesión bilateral del NPV. El 100% de las hembras lesionadas fuera del NPV (n=8) retuvo la motivación para entrar al nido, y amamantar a su camada, una sola vez en 24hrs. El 100% de las hembras con lesión unilateral (n=5), con un daño promedio de 19.9% en el NPV, retuvo la motivación para amamantar a sus críos dentro del nido. El 80% de ellas amamanto una sola vez cada 24hrs, mientras que el 20% restante, incremento la frecuencia de los amamantamientos. De las hembras lesionadas bilateralmente (n=8), el 50%, con un daño promedio de 29.8% en el NPV, retuvo la motivación para amamantar a su camada, sin embargo, alteraron la frecuencia de los amamantamientos en 24 horas. El 50% restante, con un daño promedio de 33.6% en el NPV, perdió la motivación para amamantar. Ninguna lesión modificó la duración de los episodios de amamantamiento. Por lo tanto, el presente trabajo sugiere una participación importante del NPV en la regulación de dos aspectos de la CM de la coneja: la periodicidad circadiana del amamantamiento y la motivación para amamantar.